Hoy me he despertado, hermanos, huyendo:
saliendo de un mal sueño.
Me hallaba entre vosotros, habitando el terruño
del Sáhara más inhóspito y estéril,
allá donde os acogieron, allá donde ya sois
eternos refugiados olvidados
en un olvido eterno y despiadado.
He visto algunos rostros hinchados, silenciados
por culatas de fusil y botas de soldados,
otra vez deshaciéndose la tenue ilusión
de una hipócrita y tibia diplomacia,
quebrándose de nuevo la esperanza.
He vuelto a ver vuestras famélicas cabras
que mordían la madera y el plástico,
e inquietas miraban la parsimoniosa espera
de un dromedario flaco
y el tiempo detenido
ante una puesta de sol y su belleza extraña:
la luz muriendo en sangre o fuego, dunas
que se perfilan como si ocultaran
a España, a Marruecos y a la ONU… su vergüenza.
Pero también he visto la fascinante imagen
de un grupo de mujeres que caminaban juntas,
siluetas con melfas de colores sobre el seco
horizonte de océano de arena.
Esas mujeres fértiles pariendo
sucesivamente a un pueblo sometido
bajo la enfebrecida luz del sol, bajo el manto
de todas las estrellas en un cielo infinito.
Me han mirado también los vivos ojos
de unos niños, los que sobrevivieron,
que empezaban sus clases en la escuela.
Entre ellos no veía ni a Enguía ni a Zagma,
habían crecido. Eran otros niños
y sin cesar también sonreían y cantaban,
y yo seguía sin entender de dónde manaba
su inagotable fuente de afecto y alegría.
La maestra dijo, de pronto, “me falta uno”.
Me apresuré a buscarlo por toda la wilaya,
entre las jaimas y los chozos de adobe y entre…
piedras, polvo y arena, dromedarios y cabras.
Hoy me he despertado, hermanos, sudando
cuando, al fin, hallé a ese niño que buscaba.
Estaba al fondo de un pozo, un pozo
sin agua. Quería salir él solo,
sin ayuda de nadie, con orgullo de líder
que camina seguro a destruir su espejismo:
un mañana que para él no existe.
Llevaba en su cintura una cuerda con latas,
únicamente latas de sardinas vacías…
simulando un cinturón de explosivos.
A mis hermanos de aquí, a mis otros hermanos,
a todos vosotros, mis compañeros y amigos,
debo pedir perdón… por irrumpir
intencionadamente en vuestros propios asuntos,
en vuestro ensimismamiento,
pero hoy necesitaba escribir sobre este sueño,
antes de beber agua,
antes del desayuno.
Luis Nieto del Valle, 14Nov2010
¡Sorpresa!, no es una noticia pero me ha gustado mucho leerlo. Siempre me ha parecido que no entendía la poesía pero ésta la entiendo, me llega.
ResponderEliminaryo no gusta la violencia pero aqui dice bien la forma que puede salir la violencia
ResponderEliminarMi hermana ha leído el poema y me comenta que es como si volviera a vivir sensaciones de cuando estuvo en los campamentos visitando la familia del niño que acogía en su casa. Me ha comentado muchísimas cosas mas según le venían recuerdos o yo preguntaba. Ahora no recuerdo cómo se llamaba es niño, de todos modos no lo pondría aquí, pero nos ha gustado mucho leer esto y mucho mas a ella
ResponderEliminarUf, me dijeron que había comentarios...
ResponderEliminarMe alegro que os haya gustado. Gracias a los tres. Lo que me parece interesante es todo lo demás, y he invitado a todos mis contactos a conocer este blog de noticias y la web. Yo, desde la comodidad de acá, sólo intenté expresar lo que podía bajo otra forma de "verdad".
Yo que conozco al autor, decir: Que detrás de ese hombre fortachón y curtido por el sacrificio y la disciplina exista tanta sensibilidad y amor, un ejemplo a seguir.
ResponderEliminaryo tambien desperte de un mal sueño...pues en el corria desesperada con ali, mi niño de acogida ,el lloraba pues tenia en su frente sangre de una herida y no entendia el porque. Estuve todo el dia esperando a poder llamarle , a que saliera del colegio para saber de el,por ahora estaba bien pero por cuanto tiempo. Es verdad que el mundo ,o sea nosotros todos tenemos que levantarnos a una contra nuestros politicos y nuestros gobiernos y demostrarles que ante todo somos HUMANOS y que no nos interesan sus negocios y sus politicas
ResponderEliminarGracias por escribir, Luis. En un mundo donde todos miran para otro lado. Describes la injusticia a golpe de palabra. Denuncias con la valentía que les falta a otros, gobernantes y gobernados, ávidos de ceguera, aquella que solo les llega a falta de cuatro días para ser elegidos de nuevo. Con este maravilloso mensaje, esas personas salen fortalecidas, vuelven a tener nombre y en estos días de caos ya es mucho. Alguien se acuerda de ellos. Quizás no les llegue para comer, pero si para seguir luchando por ver un nuevo amanecer. Un sincero abrazo.
ResponderEliminarSi como dicen algunos no pasa nada porque no dejan entrar a la prensa cuando esta hasta en las guerras
ResponderEliminarHay comentarios inmerecidos. Era sólo mi grito. No obstante, gracias. El mérito y la paciencia y el sufrimiento y la desgracia... la tienen nuestros vecinos del pueblo saharaui. Porque en este planeta, tan globalizado él, somo todos vecinos ¿verdad?.
ResponderEliminarNo hay arma más potente que la palabra, Luis, sobre todo, cuando interrumpe nuestra vida cotidiana para recordarnos que nuestros hermanos sufren, sin piedad, toda la furia de esta economía de casino que nos rige y nos gobierna. Y esta es una denuncia que tal vez despierte a quienes no les llega de otra forma. Por eso, empiezo a hacerla circular.
ResponderEliminarEs un tema que me hiere profundamente. Como muchos otros he convivido con niños saharauis en acogida. Cuando pones cara a la guerra, a la miseria o al abandono, no puedes ser indiferente. Te doy las gracias, por utilizar la fuerza y la emoción de tus palabras en favor de este pueblo. No se puede mirar hacia otro lado. Ya no. Basta.
ResponderEliminarLuis he compartido en mi muro del FB tu poema, espero que no te importe, eso si, respetando siempre la autoria, esta tu firma al final, tal y como está aqui, muchisimas gracias por este escrito.
ResponderEliminarUn abrazo
no recordais que este era y es un pueblo pacifico que solo queria tener los mismos derechos al trabajo ,a un hogar , comida ,agua ,sanidad que todos nosotros y no a seguir mal viviendo en un desierto esperando ayuda internacional para comer , y marruecos haciendose rica con su tierra...no recordais tambien que todo empezo asesinando aun NIÑO ,os acoardais de ELGARHI NAYEM ,su cara es la cara de un pueblo que lo esta perdiendo todo ,y lo mas importante a sus hijos ,las jovenes generaciones estan siendo masacradas ante unos gobiernos que no le ponen freno aun pais dictador como marruecos
ResponderEliminartenemos que hacer algo , algo que hiera profundamente a los gobiernos mundiales ,algo que boicotee su economia ,y les haga tambalearse para que sepan que estamos AQUI, que somos millones de personas mas que gobernantes ,se me ocurre quedar todos el mismo dia para no poner gasolina por ejemplo ,o no ir a comprar nada ni comida ni ropa o lo que sea, no hacer ninguna gestion en los bancos ,no se ....tiene que ser el mismo dia para todos...EL PUEBLO DEL SAHARA SE LO MERECE,por que mientras a ellos lo siguen matando o desapareciendo nosotros seguimos comprando y haciendo nuestra vida normal. !quedemos a traves de internet en convocar una manifestacion mundial contra esta barbarie y la mejor forma es el boicot
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