lunes, 20 de agosto de 2012

Defensores de derechos humanos saharauis y familiares de presos saharauis del campamento Gdeim Izik, son recibidos por el consejero político de la embajada estadounidense en Rabat, Marruecos

Fuente, UPES (Traducción: Poemario por un Sahara Libre) 19 agosto 2012
Un representante saharaui del Comité de Familiares de los Presos Políticos del grupo Gdeim Izik visitó el jueves 16 agosto la sede de la embajada de EE.UU. en Rabat, donde fue recibido por el asesor político de la sede diplomática americana, David Greene, y dos funcionarias de la misma sección, y en presencia de representantes de la coordinadora saharaui del campamento "Gdeim Izik". En la reunión se trató la situación de los presos políticos de Gdeim Izik, detenidos en la cárcel marroquí de Salé 2, donde se encuentran reclutados desde noviembre de 2010 sin juicio, expuestos a todo tipo de humillaciones y privaciones de los derechos elementales de los prisioneros.
Las familias de los presos en la reunión se quejaron de las distancias que recorren las familias que viven en los territorios ocupados del Sáhara Occidental o en las ciudades del sur de Marruecos para visitar sus hijos, recorridos con fatigas e insumables gastos de viajes en estas circunstancias y que en la mayor parte de sus traslados no se les permite visitar a sus hijos como se ha venido repitiéndose últimamente.
También se informó al asesor político estadounidense sobre la preocupante situación de las violaciones de los derechos humanos en las zonas ocupadas con la sistemática represión de las manifestaciones pacíficas que organizan todos los grupos sociales saharauis que reclaman sus derechos.
Al término de la reunión, el grupo entregó una carta escrita al consejero político de la embajada de EE.UU. pidiendo al Estado americano que ejerza presión sobre su aliado, a fin de respetar los derechos humanos en los territorios ocupados del Sáhara Occidental y la liberación de todos los presos políticos saharauis.
Al final del encuentro el consejero político de la embajada estadounidense reafirmó su interés en el conflicto saharaui, escribiendo y enviando informes al Departamento de Estado sobre todo lo que sucede allí y pidiendo información a las autoridades marroquíes sobre el dossier de los presos políticos saharauis y la situación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental.

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