Día Internacional del Preso Político

Hoy, 17 de abril, como cada año, se conmemora el Día Internacional del Preso Político. Para la Asociación de Familiares  de Presos y Desaparecidos Saharauis (AFAPRADESA) es una fecha de suma importancia por ser el pueblo saharaui víctima de la detención arbitraria desde hace más de 37 años. Desde el 31 de octubre son más de 28.000 personas, hombres, mujeres e incluso niños, las que han sido secuestradas, detenidas y torturadas por el simple hecho de ser saharauis.

Los presos políticos saharauis siguen siendo objeto de tortura y malos tratos, algo que les priva de las condiciones mínimas de un trato digno como personas que son. Actualmente, 75 saharauis están entre rejas por ser defensores de derechos humanos, activistas en pro defensa del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, o por haber participado en manifestaciones pacificas contra la ocupación marroquí. 22 de ellos son perseguidos por un tribunal militar marroquí por su participación en la protesta de Gdeim Izic. Son civiles y están detenidos en malas condiciones en la cárcel de Salé, sin juicio desde hace más de un año y medio.

AFAPREDESA se solidariza con todos los presos políticos saharauis y otras partes del mundo, y se muestra unida y decidida en esta defensa de la libertad de los presos políticos. AFAPREDESA condena las detenciones arbitrarias y la tortura infligida contra los presos políticos saharauis y exige su puesta en libertad.

Al mismo tiempo, AFAPREDESA continuará trabajando por el fin de la impunidad de los responsables materiales e intelectuales culpables de estas graves violaciones de derechos humanos contra la población saharaui indefensa.

AFAPREDESA lanza un llamamiento a la comunidad internacional, y muy particularmente a Naciones Unidas, presente en el territorio desde el 6 de septiembre de 1991 para que vele por el respeto de las normas internacionales en materia de derechos humanos, a España, en su calidad de potencia administradora del territorio por su no culminación del proceso de descolonización, tiene la obligación jurídica, moral y política de actuar ante Naciones Unidas para la ampliación del mandato de la MINURSO[1] y la inclusión de la vigilancia de los derechos humanos en ella.

Campamentos de refugiados saharauis, a 17 de abril de 2012.