El nuevo acuerdo pesquero UE-Marruecos, posible en "unas semanas"

El embajador de la Unión Europea en Marruecos, el español Eneko Landaburu, se mostró optimista el lunes sobre la conclusión de un nuevo acuerdo pesquero entre Rabat y la UE en "unas semanas", fruto de las negociaciones que se reanudaron el otoño pasado.

Dichas negociaciones, que han dado pie a cuatro rondas de conversaciones desde noviembre, deben permitir superar el bloqueo resultante del rechazo por el Parlamento Europeo, en diciembre de 2011, de la prórroga de un acuerdo anterior por el que 120 barcos con pabellón de 11 país europeos -españoles un centenar de ellos- podían faenar en aguas del reino.

"Hemos logrado en poco tiempo, a pesar de este choque, reiniciar una negociación que está en curso y espero que concluya en unas semanas", declaró Landaburu en una rueda de prensa en Casablanca.

Desde el inicio de las negociaciones, "hemos avanzado mucho en la resolución de toda una serie de problemas técnicos, sobre los tipos de pescado que se podrá pescar, el tipo de barcos y de pesca que serán autorizados...", agregó.

Según el embajador europeo, el clima es "excelente" y "existe una voluntad por ambas partes de llegar a un buen resultado". Una nueva ronda de negociaciones empieza el próximo lunes en Rabat, pero el embajador evitó prometer un acuerdo en ese momento.

"Está pendiente una cuestión importante, que es la remuneración", señaló. "Es una cuestión complicada, pero sigo siendo optimista. Lo digo como cosa mía, creo que habrá acuerdo de aquí a final de marzo", agregó Eneko Landaburu.

Para motivar su rechazo del acuerdo precedente, ciertos diputados europeos estimaron que claramente no tenía en cuenta los intereses de la población del Sahara Occidental, es colonia española controlada por Rabat. Otros, "la mayoría" de los europarlamentarios concernidos, consideraban que el acuerdo salía demasiado caro, indicó Landaburu entonces.

Marruecos, único país que dispone de un estatuto avanzado con Bruselas, replicó pidiendo a los pesqueros europeos que abandonaran sus aguas. España pidió entonces una "compensación" financiera a la UE y cientos de pescadores se manifestaron en el sur del país contra ese bloqueo.

Ante la prensa, el embajador Landaburu hizo balance global de la relación con Marruecos en 2012 y evocó las perspectivas para 2013. Eneko Landaburu se congratuló sobre todo de los pasos de cara a la puesta en marcha del "estatuto avanzado" concedido en 2008 y del "desarrollo del diálogo político" con Rabat.

En cambio, exhortó a la instauración de un "plan de convergencia" entre las reglamentaciones marroquíes y europeas y evocó una "frustración" por la lentitud de la reforma de la justicia en el reino. Este año debe permitir "lanzar una negociación más amplia (...) para conseguir una mayor integración de nuestras economías", aseveró el español, que dejará sus funciones a finales de marzo.